EL ENEMIGO EN CASA

EL ENEMIGO EN CASA

 

24/05/2021/ECM

 

Es evidente que tenemos al enemigo dentro y que ese enemigo no tiene nacionalidad marroquí, sino que es el Gobierno de España.

 

La contención, el apaciguamiento, la corrección política, los complejos y la cobardía son los mejores aliados del sátrapa marroquí y en España la  cobardía del Gobierno, después de haber provocado con sus actos la irritación marroquí y su consecuencia invasora a la soberanía española, está demostrada.

 

Chamberlain, canciller británico, famoso por su política de apaciguamiento con respecto al Tercer Reich, así como su firma del Acuerdo de Múnich otorgando a ese país la región germanófona de los Sudestes de Checoslovaquia, fracasó y dimitió. Menos mal que Gran Bretaña encontró un líder con carisma, como Winston Churchill, que le hizo ganar la guerra contra el loco alemán.  ¿Creen ustedes que los ingleses dejarían que invadieran Gibraltar como se ha invadido Ceuta? Que se lo pregunten a los argentinos, que todavía recuerdan la potente reacción británica en las Malvinas. ¿Se imaginan que Margaret Thatcher pusiera en movimiento las Task Force para repartir agua, galletas y toffees a los argentinos durante la invasión de las Malvinas?

 

Otro ejemplo: ¿Qué habría sido de Israel si en lugar de defenderse con furia se hubieran dedicado a repartir caramelos a los árabes? Los ingleses y judíos, como muchos otros pueblos, saben hacerse respetar por sus enemigos; España no ha aprendido todavía porque está gobernada por mediocres y traidores dirigentes de un ilegitimo Gobierno sustentado por grupúsculos de delincuentes, golpistas y filo terroristas, todos ellos enemigos declarados de la Nación.

 

No sabemos lo que  va a durar esto y cuanto nos cuesta a los españoles el chantaje continuo, de Marruecos, ero si intuimos y creemos que la invasión de menas no es espontánea y que estamos ante un ensayo general de lo que puede ser la segunda Marcha Verde y que  las masas marroquíes y sus ejércitos se lanzarán contra Ceuta y Melilla y entonces, si este Gobierno cobarde  sigue,  probablemente utilizaremos a los Regulares, a la Legión, a policías y guardia civiles para repartir galletas, agua y caramelos como armas de disuasión o defensa. La realidad es que no estamos preparados para este órdago, porque no tenemos los dirigentes necesarios.

 

 Pero no acaba aquí la broma, si ocupan Ceuta y Melilla, más pronto que tarde, vendrán a por Canarias y después a por el califato de Al-Ándalus, pues ya les hemos proporcionado la borrachera de éxito que necesitaban.

 

No acaba aquí el mal: Los españoles no sabemos lo mucho que nos cuesta la política opaca con Marruecos, lo que  nos cuestan los muchos regalos y sobornos a las élites de Marruecos, cuánto nos cuesta mantener a tanta inmigración ilegal, que se alienta que la agricultura marroquí arruine a la española, etc., etc. Pero lo que sí sabemos es que España está en la UCI y que para que España siga adelante necesita urgentemente un rearme moral, que este Gobierno es incapaz de proporcionar, primero porque no quiere, ya que está vendido a las antagónicas y perversas tesis globalitas y lo segundo porque no sabe casi de nada, como a diario demuestra. 

 

España, necesita urgentemente un Ronald Reagan a la española que, tras el fracaso de Vietnam y el secuestro de la embajada americana en Teherán, comprendió rápidamente que la autoestima del pueblo americano estaba por los suelos y que había que recuperar el orgullo perdido y en España,  hoy por hoy, el único “Ronald Reagan”  que no ha tenido ni miedos ni complejo en llamar a las cosas por su nombre ha sido Abascal, que dice claramente que hay que poner muros para defender la frontera e instalar detrás al ejército, previo desalojo del nefasto enemigo que está dentro y mal gobierna la Casa común de todos los españoles.

 

24/05/2021

 

Emilio Clemente Muñoz