EL ESTADO, EL MAYOR ENEMIGO DEL CIUDADANO
30 de Enero 2021/VB
General e históricamente los estados suelen ser los mayores enemigos de los ciudadanos y en mayor medida de aquellos ciudadanos productivos, o sea, de los abnegados contribuyentes. Pero el Estado español lo hace con especial saña, obligando al ciudadano a estar a la defensiva desde el momento que se levanta de la cama hasta que se acuesta por la noche, es decir todo el día en estado de alerta.
Y es que eI bienestar del ciudadano le importa un bledo al Estado, se pasa todos los días del año saqueándonos y ahora mismo estamos en vísperas de que el gobierno suba un escalón más de la escalera del saqueo y el expolio de la clase productiva española: La "Armonización fiscal" no es otra cosa que un apodo de “la nueva lengua” para perpetrar el enésimo saqueo a la clase media. El Estado Español es una estructura de saqueo y expolio a las clases medias, con un sistema impositivo cuyo único objetivo es robar todo lo posible a los contribuyentes.
El sistema impositivo explota, saquea y roba con un impresionante despliegue técnico, humano y propagandístico integrado por los mejores profesionales, con los mejores ordenadores, de los que hay que estar defendiéndose, o tragar, las 24 horas del día. El dinero recaudado va a dos grupos: uno, el de la clase dirigente y a una red clientelar de electores que le da soporte. Esas clases privilegiadas: partidos políticos, sindicatos, altos funcionarios y algunas grandes empresas, tienen por objeto maximizar el expolio mientras que se desprecia y se subestima el propio sistema productivo, como al autónomo o empresario de éxito; se entorpece la innovación y se impone un esquema de valores en el que el enriquecimiento honrado es moralmente criticable. No les importa tener unos servicios públicos deplorables y otros falsarios servicios sociales que solo llegan al necesitado en forma de mentira propagandística. No les importa el ciudadano.
Veamos: De lo que gana un humilde trabajador el Estado empieza a sangrarlo con el IRPF, más adelante cuando lo va gastando lo atosiga con un IVA abusivo, si logra ahorrar algo le sacuden con el Impuesto sobre el Patrimonio, si lo regalamos te asaltan con el impuesto de Donaciones y cuando nos morimos te rematan con el Impuesto de Sucesiones, sin olvidar que durante tu dilatada vida te atracan con multas diversas, tasas indiscriminadas, sanciones arbitrarias de todo tipo, impuestos y tributos municipales injustos, recibo de la energía domestica insostenible para las familias medias ….y demás malvadas fechorías que nos obligan a estar siempre a la defensiva y en inferioridad de condiciones frente al poderoso poder de un macro Estado enemigo.
Por si fuera poco se diseña un sistema para que los políticos continúen cobrando de los consejos de administración de las grandes empresas a las que antes han ayudado a costa de robar al humilde contribuyente –maniobra perversa a la que popularmente se la conoce como la de las “ puertas giratorias”-.
A todo esto hay que añadir un cuarto poder: los medios de comunicación, que en la práctica no es más que un formidable aparato propagandístico de una clase en la que el sentido crítico, el análisis imparcial y la objetividad han desaparecido por completo, mientras se nutren con cifras escandalosas de los presupuestos del Estado, siendo el elemento más obsceno de la corrupción del sistema y por si fuera poco para divulgar su falsaria propaganda ejercen permanente el soborno a los medios privados con cantidades multimillonarias de nuestros injustos impuestos.
Los costes de todo esto son enormes: Un sistema productivo menguante y una productividad estancada desde hace 15 años. España va alejándose poco a poco de los niveles de renta de los cinco grandes de la Unión Europea. La corrupción y la mala gestión se ven a simple vista. La carestía de la vivienda, la alta factura de la electricidad, la falta de oportunidades, la inflación de leyes, la pesada burocracia, la poca innovación o los salarios bajos son fruto del saqueo.
Y lo más grave: Hoy defender la igualdad frente a la ley llega a ser un acto de subversión. La tiranía se ha colado en nuestra casa sin llamar y debemos expulsarla, todos juntos, como ellos entraron, sin contemplaciones.
30 de Enero de 2021
Emilio Clemente Muñoz